Jugando con el ancla y los lastres

Esta web no es marina ni trata de pesca. Su autor no es de ninguno de esos ramos ni pretende serlo no es una opción profesional que haya contemplado nunca. Aquí se pescan palabras y se colocan en espetos para alimentar nuestra inteligencia como lleguen al plato es indiferente, vienen y punto.
A propósito de palabras y náutica se habrán dado cuenta cómo se ha universalizado el uso de palabras técnicas de las ciencias que vienen del agua. Usar metáforas marineras está de moda y se usan la mayoría de las veces sin un rigor mínimo que endosa cualidades negativas a algo que no las tiene. Ambas son ciencias utilitarias que no se entienden sin el uso práctico de la misma. Las más dolorosas patadas a su diccionario vienen por el entusiasmo de políticos de tierra adentro y dentro de ellos las que más me hieren vienen de la bancada ultraliberal que cuando hablan de mercado ven en sus votantes cara de pez y pujan por ellos según lo que esperan sacar de ellos. Abrazan la libertad de la navegación olvidándose de la cantidad de reglas que hay que cumplir para que esta sea segura y lleguemos a buen puerto enteros, para llegar con capturas ni te cuento.
No es sencillo y por ejemplo asociar un ancla a la crisis económica parece muy imprudente pero esta señora cree que sí se puede.
Para demostrar que lo del anclaje en general tiene más vertientes que contemplar que el arriba-abajo que nos enseñaron primero los teleñecos y luego la exitosa serie  de televisión, no creo que haya llegado más allá su documentación previa, les adjunto un texto muy técnico que nos muestra el apasionante mundo del frenado controlado de barcos.
http://www.nauticaygps.com.ar/Nautica/garete/garete.php
Yo, personalmente y después de saber los requisitos, antes de mandar a alguien al garete me lo voy a pensar si no dispone de Gps. Este caso en particular me lo provoca, me aguanto las ganas.
Hasta otra.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La línea de flotación en Economía

Necesitando el agua desesperadamente, la SED.

Un buen precedente de movida líquida, hecho